Con el objetivo de que nuestros clientes se adapten rápidamente a la nueva situación causada por la Covid-19, desde Conversia hemos publicado varias guías de reactivación, como la dirigida al sector Horeca o la destinada al sector comercial. En esta ocasión, presentamos una nueva guía, orientada a la reapertura de oficinas y despachos.
Si bien es cierto que gran parte del trabajo que se desempeña en oficinas y despachos se ha podido realizar de forma telemática durante el confinamiento, poco a poco las empresas están optando por adaptarse a la “nueva normalidad” e ir reabriendo los centros administrativos. Por este motivo, desde Conversia facilitamos a nuestros clientes una Guía de reapertura de las oficinas y despachos en la que se explican todos los procedimientos y medidas de higiene y seguridad que se deben implantar en el proceso.
Tal y como se especifica en el documento, antes de la apertura de las oficinas, la dirección de la empresa debe llevar a cabo una serie de medidas organizativas que permitan garantizar la seguridad de sus trabajadores. Un ejemplo sería establecer turnos de trabajo y/o entradas y salidas escalonadas del personal. Los negocios también deben optar por limitar el uso de los ascensores de los edificios, dando preferencia a la utilización de las escaleras, así como marcar itinerarios de circulación para dirigir el flujo de personal y evitar las aglomeraciones. Asimismo, es necesario reorganizar las mesas de los empleados para garantizar una distancia de dos metros entre ellos. En caso de no ser físicamente posible, sería imprescindible utilizar mascarillas o establecer separaciones físicas entre las mesas.
La guía también especifica las medidas de higienización, entre demás información, y facilita una serie de documentación relacionada con los registros de higienización de los distintos espacios o carteles informativos para disponer en los equipamientos.
¿Por qué es tan relevante la publicación de esta guía?
En la actualidad, los trabajos que se realizan en despachos y oficinas van más allá de tareas puramente administrativas. Además de los departamentos internos de cualquier negocio (administración, jurídico, marketing, atención al cliente, etc.), también encontramos empresas cuya tarea productiva se desempeña desde despachos. Entre estas encontramos servicios de informática y programación, callscenters, despachos de arquitectos o de abogados, redacciones de medios de comunicación, agencias de publicidad, gestorías, así como muchas áreas de la administración pública, hasta llegar a un sinfín de puestos de trabajo.
Todos ellos se ven afectados por esta situación de desescalada y reincorporación a la oficina, cuya implantación debe desarrollarse de forma progresiva y contando con el tutelaje y coordinación de los diversos responsables implicados.
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